Cada vez está más de moda colocar un cuarto lavadero en casa, y aunque a primera vista podamos pensar que se trata de una estancia para casas grandes, lo cierto es que cada vez hay más soluciones para casas pequeñas, donde poder integrar algo tan funcional y tan útil de la mejor manera. 

La cocina es normalmente la habitación donde se suele colocar esta zona de lavandería. Sin embargo, siempre puedes optar por trasladarla a espacios menos habituales para compartir protagonismo con esta zona. 

Por ejemplo un cuarto de lavado puede compartir espacio con la despensa, y se convierten en una alternativa perfectamente válida. O para casas de más de una planta, también se convierte en una opción colocar el cuarto lavadero en el baño del segundo piso (así evitarás el trasiego de ropa de arriba a abajo) bien integrándolo al espacio que haya o incluso de una forma sutil, con alguna puerta corredera para que no se vea a primera vista ni reste protagonismo al propio baño. Si lo que quieres es que tenga su propio espacio, puedes trasladar la zona de lavado a la terraza, así liberarás espacio de otras estancias y darás cierta intimidad a tu cuarto lavadero. 

Si la integras en la cocina y no es un espacio independiente, no te preocupes, plantea el proyecto en conjunto y busca un equilibrio para que cada área esté perfectamente delimitada y cuente con todo lo necesario para cumplir su función.  

Aquí dejamos algunas ideas a tener en cuenta para montarte un cuarto lavadero en casa: 

  • Distribución: No es lo mismo montar un cuarto para lavado en una estancia concreta que aprovechar algún hueco de la casa, pero una de las cosas fundamentales a tener en cuenta es la distribución. Teniendo esto en cuenta podrás aprovechar todos los metros que dediques a la hora de la colada. 

Si no te ves capaz de sacarle partido a tu espacio, siempre puedes pedir la ayuda de algún profesional, seguro que conseguirá que todo encaje a la perfección. 

  • Color: como en muchos casos, es un tema muy importante, apuesta por colores claros y luminosos o sencillamente blancos, que proporcionen una sensación de frescura y limpieza. 

Asimismo, si no es una estancia concreta, puedes elegir que tu zona de lavado se mimetice con el resto de la estancia, ‘encerrando’ los electrodomésticos dentro de muebles del mismo color para que una vez cerradas las puertas, el espacio fluya sin problemas. 

  • Iluminación: respecto a este tema, si no cuentas con luz natural, lo mejor es que coloques iluminación led que dan buena iluminación y consumen poca energía. 
  • Electrodomésticos: obviamente un cuarto de lavado tiene que contar al menos, con una lavadora, dependiendo de tus necesidades y tu espacio también podrás incluir secadora, bien puedes apilarlas una encima de otra u optar por la versión más compacta que es comprar un solo electrodoméstico que sea lavadora-secadora. Eso sí, apuesta siempre por electrodomésticos eficientes y de calidad, que te permitan ahorrar tiempo, energía y dinero. 
  • Organizadores: además de la lavadora y de la secadora, hay que buscar hueco para añadir accesorios, desde canastos y cestas, tendederos bien portátiles o bien fijos (según el espacio del que dispongas) y tablas de planchar. Este tipo de mobiliario puede ser fijo, con estanterías de madera, por ejemplo, o pueden ser carritos portátiles que podamos mover de un lado a otro y que nos facilite la limpieza. 
  • Muebles: no se trata de atiborrar el espacio, con que coloquemos un mueble cerrado encima de los electrodomésticos o si lo prefieres algunas baldas, podrás almacenar todos los productos de limpieza y mantenerlos en orden. Si no quieres poner muebles encima, puedes hacer un mueble a medida que recoja a la lavadora y la secadora y que tenga cajones para poder guardar las cosas. 
  • Más accesorios: si tienes la suerte de contar con mucho espacio, puedes añadir una pileta para lavar o simplemente un fregadero, que resultan muy útiles a la hora de tener que lavar a mano o enjuagar algo. 

El lavado forma parte de nuestras rutinas diarias y por eso es fundamental contar con espacios que satisfagan esas necesidades de la manera más práctica y eficaz posible, para que incluso la hora de poner la lavadora puedas disfrutar de un espacio reconfortante y cómodo.