Instala fácilmente en casa tu suelo vinílico

Tus suelos necesitan una reforma urgente. Cada vez que entras en tu casa y ves el estado en el que se encuentran, la idea se vuelve más y más fuerte. Sin embargo, cuando valoras tu capacidad económica, compruebas que no puedes permitirte adquirir nuevas lozas e instalarlas. Lejos de que esta realidad llegue a desanimarte, puedes optar por una alternativa intermedia. Esto supondrá un gasto, considerablemente menor que el que deberías afrontar por un acometer una reforma y el resultado, te aseguramos que es espectacular. 

Si quieres ahorrarte el gasto que implica la instalación, vamos a comentarte algunas cuestiones que debes saber. Lo primero es que puedes comprar vinilos en dos tipos de formatos diferentes, siendo estos en baldosas o en rollos. Estos últimos resultan más difíciles de manipular, dado que los rollos suelen medir entre dos y cuatro metros. Antes de adquirirlos, debes medir la zona donde los ubicarás para saber, exactamente, cuántos rollos vas a necesitar. En el caso de que necesites más de un rollo, debes prestar una especial atención a las uniones entre unos y otros. Para que quede perfectamente, te aconsejamos que los instales en perpendicular al punto de donde proceda la luz. De este modo, las juntas no serán tan perceptibles y, por supuesto, recuerda recubrirlas con cinta adhesiva para evitar que se desplacen con el uso y dejen ver el material que está en la zona inferior. Además, debes eliminar el espacio entre líneas con la ayuda de un cúter y aplicar cola específica para este tipo de revestimientos para que quede perfectamente soldado. 

Si no eres demasiado hábil con las manualidades, lo mejor es que te decantes por los de baldosas. La razón es simple: vienen en formato individual y solo tendrás que pegar la cara adhesiva de su base. Por tanto, no requerirá mayor esfuerzo que manipular la lámina protectora y tener cuidado para que no se formen arrugas al pegarlo. Verás que una vez que estén todos colocados, tu estancia parecerá otra.