A pesar de la crisis sanitaria, el sector inmobiliario se ha ido recuperando durante el año pasado, llegando a alcanzar niveles de compraventa previos a la pandemia y los expertos prevén que durante el 2022 se mantendrá esta tendencia, siempre que la situación económica, laboral y sanitaria sigan evolucionando favorablemente.
No obstante, los cambios acontecidos que ha traído el confinamiento y la implantación del teletrabajo han sido fundamentales a la hora de entender cuáles van a ser los factores determinantes para los futuros compradores.
En Treshabitat te contamos cuáles son los factores que influyen en este 2022 a la hora de comprar un inmueble.
Inmuebles más espaciosos y alejados de núcleos urbanos
Precisamente el confinamiento ha provocado que la mayoría de los compradores actuales demanden viviendas más amplias y que cuenten con zonas exteriores. La posibilidad de trabajar desde casa también influye a la hora de buscar un inmueble en la periferia o incluso en zonas rurales.
Buenas condiciones hipotecarias
Mientras el Euribor y los tipos de interés se sigan manteniendo en niveles bajos, los compradores van a encontrarse con un mercado hipotecario bastante interesante, ya que los bancos están concediendo hipotecas con unas condiciones muy ventajosas, sobre todo, en las hipotecas a tipo fijo, que facilitarán la compra de inmuebles.
Precios prácticamente sin cambios
Aunque en 2021 hubo una cierta tendencia a la baja en los precios, con respecto a la compraventa, finalmente se han mantenido estables o con algún crecimiento moderado y esta es la tendencia, siempre dependiendo de la zona, que continuará durante el 2022.
Aumento de la demanda
España siempre ha sido tradicionalmente un mercado inmobiliario en el que se apuesta por la propiedad y por eso, el 2022 empieza con un índice positivo en el que probablemente la demanda será mayor que la oferta, algo que podría complicar que los compradores encuentren la vivienda adecuada a sus gustos y circunstancias, sobre todo ante la escasez de obra nueva.
No obstante, esto también provocará que haya un aumento en la demanda de viviendas de segunda mano, lo que redundará en un incremento de las reformas.